martes, 19 de abril de 2011

Mucho más que un amor de verano

Un día de verano en el cual caminabamos por el bosque debajo de la cálida sombra de la tarde, todo era silencio, todo era hermoso solo eramos nosotros dos, tomados de la mano charlando de la vida. Quise congelar el tiempo, quise que todo se detuviera allí, que el mundo parara de girar por un segundo, por un momento, por y para toda la vida. Llegaron algunas nubes que taparon el sol y este solo podía verse como un reflejo. Sujete su mano más fuerte, me sentía segura. Sentí que una pequeña gota caía sobre mi mejilla. El me miró, lo miré, nos miramos profundamente a los ojos y se largo una pequeña llovizna.
Luego sentí que sus brazos me tomaron y me abrazó como nunca me había abrazado, el más hermoso abrazo que me había dado. Luego me dijo que me amaba y sentí sus labios que también me besaron como nunca me habían besado,allí debajo de la lluvia donde se asomaba el sol y las indefinidas nubes de algodón.
                                                        

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